¡Qué suerte más rara!

Hoy hablaba con alguien que me dijo esta frase porque me alivió que un pedido que hice no llegara, y le dije que por eso yo tenia suerte, me respondió con esto: ¡Qué suerte más rara! Y me quedé pensando en todas esas veces que estamos pasando por un mal momento y solo nos concentramos en lo negativo y no vemos esos pequeños instantes de suerte que nos facilitan pasar por ese otro mal momento que nos quita toda nuestra atención y energía. Pequeños momentos de suerte que tal vez no son tan obvios y por ende, no los agradecemos o apreciamos como deberíamos.

Les cuento el chisme: este fin de semana tuve un pequeño accidente, ese pequeño accidente que pasó en segundos trajo una cadena de consecuencias bastantes significativas para mí, tuve que cancelar un viaje que tenia esta semana, me quedé sin carro por unos días (lo cual me dificulta mucho mi rutina diaria) y pues también voy a tener unos gastos que no estaba esperando y por ende no tenia presupuestados. Todo esto provocó que yo pasara triste todo el domingo, es como este tipo de situaciones de adulto con las que tengo que lidiar aunque no quiera y aun para este momento de mi vida este tipo de cosas me drenan de sobremanera la energía y me quitan las ganas de lidiar con esta vida de adulta jaja.

Con todo este pésimo escenario, pude decir esta frase hoy: “Yo a veces tengo suerte” por algo que pasó que es mínimo, pero es que es cierto, a pesar de que algo malo pase, yo tengo suerte. Suerte porque lo que me pasó pudo haber sido peor, las consecuencias pudieron ser peores, suerte porque mi pedido no llegó y asi me ahorre esa plata que iba a gastar en eso y que ahora voy a necesitar para otra cosa, suerte porque pude cambiar la reserva que tenia para esta semana sin ningun problema o multa, suerte porque tengo a mi familia que me apoya en lo que sea que me pase, suerte porque ayer gracias a esto tuve la oportunidad de tener a uno de mis hermanos en mi apartamento y pasamos mucho tiempo juntos, tomamos café, nos reimos, me acompañó cuando estaba triste y me sentía sola, tuvimos chismecito y me demostró su amor mediante esos actos de ayuda que yo tanto aprecio y me hace ser agradecida de tenerlo en mi vida, suerte porque incluso después se nos unió mi otro hermano, mi mamá y mi sobrina que llegaron a ayudar como un batallón. Ellos son el mejor sostén y apoyo que tengo, los que me llevan por la vida de la mano, me levantan, me demuestran que no estoy sola, me ayudan a limpiarme los raspones y me dicen que todo va a estar bien.

Yo sé, sueno como estas personas cansonas que son demasiado positivas y hasta dan pereza, pero quien realmente me conoce sabe que yo no soy tan positiva, de hecho tengo la capacidad de imaginarme los peores escenarios, y en realidad cuando paso por un momento difícil necesito tomarme mi tiempo para poder reponerme, y aun asi, yo misma tengo la capacidad de percibir esos pequeños golpes de suerte que voy teniendo en medio del estres y la ansiedad, y creo que es gracias a que de un tiempo para acá me he permitido más a mi misma fallar, perdonarme, y ser mas consciente de lo que pasa a mi alrededor y entender que todo pasa por algo, aunque lo que pasa no nos guste o no sea lo que queramos.

Una vez habia escrito una entrada del blog que se llama “Todo lo bueno pasa, todo lo malo vuelve” y ahi justamente hablaba que la vida no puede ser perfecta si no no tendria gracia, seria muy aburrido, y debo admitir que mi vida habia estado muy bien y sin errores ultimamente, ya necesitaba un poquito de sazón para darle emoción a la cosa, para desestabilizarme, para enseñarme algo nuevo. ¿Era lo que yo queria aprender? No. ¿Era el momento ideal para aprender algo de esta manera? No. Pero mae, asi funciona la vida. Lo que menos queremos que pase, cuando menos queremos que pase, pasa.

Lo bueno de todo esto es que eventualmente va a ser solo un recuerdo e incluso me voy a poder reir de lo que pasó. Lo malo es que me veo obligada a pasar primero por aqui, pero al final depende mí si dejo que me afecte o no, depende de mí la forma en la que voy a lidiar con la situación, y con esto quiero dejarlos, con que cuando estén pasando por algo difícil, traten de encontrar esos pequeños golpes de suerte que nos ayudan y nos motivan, traten de ser agradecidos por lo que si tienen o por las ayudas que les llegan de diferentes lugares, y traten de adueñarse de la situación porque al final depende de nosotros mismos como pasamos y vivimos las cosas.

Creo fielmente que cuando tenemos una buena actitud, como que solita la vida nos acomoda las cosas, porque acuerdense que mala energía atrae solo mala energía de vuelta. Permitanse sentirse mal, permitanse regañarse, pero no se permitan quedarse ahi. Acuerdense que la suerte a veces es rara, pero no deja de ser suerte.